Tarta de queso congelada de chocolate y avellanas
- Tiempo de elaboración y cocción
- Tiempo total
- más congelar por la noche
- Fácil
- Para 8-10 personas
- 200 g de queso crema entero
- 1 cdta de extracto de vainilla
- 2 huevos de corralclaras y yemas separadas
- 125 g de Nutella (u otra crema de chocolate y avellanas, como Nocilla, o Asturcilla)procura elegir la que tenga menos azúcar
- 100 g de azúcar extrafino
- 300 ml de nata líquida
- 75 g de avellanas tostadaspicadas en trozos irregulares
- natapara servir (opcional)
Para la base de la tarta
- 250 g de galletas Bourbon (u otras galletas de chocolate tipo sándwich)
- 75 g de mantequilla con salderretida
Valor nutricional: por ración
- kcal508
- grasa37.7g
- saturadas19.5g
- carbohidratos34.2g
- azúcares25.4g
- fibra2g
- proteína6.6g
- sal0.4g
Preparación
paso 1
Forra un molde para pan de 900g con film transparente (untar ligeramente el molde con aceite ayuda a que se adhiera bien). Coloca el queso crema, la vainilla, las yemas de huevo de los huevos separados, la Nutella y 50g de azúcar en un bol y bate con batidoras eléctricas hasta que quede suave. Limpia las varillas y, en otro bol, bate las claras de huevo hasta que estén firmes. Añade los 50g restantes de azúcar, bate hasta que esté brillante y espeso, y luego incorpora a la mezcla de queso crema. Finalmente, bate la nata para montar hasta que esté espesa, luego incorpórala también.
paso 2
Vierte las avellanas en la base del molde y distribúyelas uniformemente. Vierte el relleno de la tarta de queso encima, extiende para aplanar la parte superior y luego congela durante 3 horas hasta que esté casi sólido.
paso 3
Tritura las galletas Bourbon en un bol con el extremo de un rodillo hasta obtener migas gruesas, luego mezcla con la mantequilla derretida. Cuando el relleno esté listo, esparce la base de galleta por encima, presiona para compactar sobre la tarta de queso congelada y congela nuevamente durante la noche.
paso 4
Para servir, saca la tarta de queso del congelador 15 minutos antes de servirla y desmolda con cuidado sobre un plato de servir, despegando el film transparente. Corta y sirve con nata, si lo deseas.
