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Ingredientes

  • 1 kg de fresas congeladas
  • 150 g de azúcar extrafino
  • 3 hojas de gelatina
  • 400 g de pan brioche
  • 200 g de frambuesas
  • 150 g de arándanos
  • crème fraîche, para servir

Preparación

  • Paso 1

    Vierte las fresas, el azúcar y 100 ml de agua en una cacerola a fuego medio. Cocina, revolviendo, durante unos 30 minutos o hasta que tenga consistencia de mermelada. Coloca las fresas cocidas en un colador sobre un bol y déjalas escurrir.

  • Paso 2

    Remojar las hojas de gelatina en agua fría hasta que estén blandas, unos 5 minutos. Pon el zumo de fresa escurrido en una cacerola (necesitarás unos 500 ml; rellénalo con un chorrito de agua si es necesario) y caliéntalo hasta que hierva a fuego lento. Retirar del fuego. Exprime el exceso de agua de la gelatina y luego agrega el zumo templado hasta que se disuelva por completo.

  • Paso 3

    Forrar un molde alargado para pan de 900 g con film transparente. Retira la corteza del pan de brioche y luego córtalo a lo largo en rebanadas largas para que quepan en el molde.

  • Paso 4

    Remoja una larga rebanada de brioche en la gelatina de fresa y luego úsala para cubrir el fondo del molde. Vierte algunas de las frambuesas, los arándanos y las fresas cocidas encima y luego un chorrito de gelatina. Repite con las rebanadas de brioche restantes, los frutos rojos, las fresas cocidas y la gelatina hasta llenar el molde, terminando con una capa de brioche. Cubre con film transparente y luego presiona firmemente. Mételo en la nevera durante al menos 4 horas, o idealmente durante la noche.

  • Paso 5

    Para servir, desmoldar con cuidado, cortar en rebanadas y servir con la crème fraîche a un lado.

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