Sándwich de queso y tomates de temporada

Precalienta el horno a 220°C/200°C con ventilador/gas 7. Pica los tomates más grandes y colócalos en una bandeja de horno junto con las ramas verdes, ya que también aportan sabor. Con el lado de un cuchillo, aplasta ligeramente los dientes de ajo y agrégalos a los tomates junto con el tomillo limón. Rocía con el aceite y sazona bien. Mezcla con las manos para combinar. Asa durante 25 o 30 minutos hasta que estén suaves y ligeramente carbonizados. Retira con cuidado las pieles de ajo y machácalos junto con los tomates, luego asa 15 minutos más. Deja enfriar un poco, luego retira las ramitas de tomillo y deséchalas.

Unta la mayonesa en el exterior de cada una de las cuatro rebanadas de pan, luego esparce los tomates en los otros lados y cubre con el queso. Coloca otra rebanada encima, con el lado de la mayonesa hacia afuera, y pon en una sartén. La mezcla de tomate sobrante se puede conservar en un recipiente hermético en el refrigerador hasta cinco días.

Pon la sartén a fuego medio-alto, coloca una bandeja para hornear o una cacerola encima del sándwich y añade peso encima con un par de latas. Alternativamente, también puedes usar una prensa si tienes una. Fríe durante 4 o 5 minutos hasta que esté dorada, luego voltea con cuidado, limpiando la base de la bandeja o sartén para quitar cualquier mayonesa, y presiona nuevamente. Cocina de nuevo 4 o 5 minutos más hasta que esté dorada, luego corta por la mitad y sirve.