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  • 2 lonchas de jamón asado, u otra carne navideña sobrante
    desmenuzada
  • 2 tortillas grandes de harina de trigo o maíz
  • 1 trozo de cheddar u otro queso duro como manchego
    rallado

Para la cebolla encurtida

  • 4 cdas de vinagre de vino blanco
  • 1 pieza de anís estrellado
  • copos de chile
  • 2 cdas de azúcar dorado
  • 1 cebolla roja pequeña
    finamente rebanada
  • 1 puñado de hojas de menta, en trozos
    para servir

Valor nutricional: por ración

  • kcal346
  • grasa14g
  • saturadas8g
  • carbohidratos37g
  • azúcares8g
  • fibra3g
  • proteína17g
  • sal2.1g

Preparación

  • paso 1

    Para hacer la cebolla encurtida, calienta el vinagre, las especias y el azúcar en una cacerola pequeña con 4 cucharadas de agua hasta que el azúcar se disuelva. Pon la cebolla en un bol. Cuela el líquido sobre la cebolla y deja encurtir al menos 20 minutos o hasta un día. Cuanto más tiempo lo dejes, más suave y encurtida quedará la cebolla.

  • paso 2

    Esparce el jamón uniformemente sobre una de las tortillas, luego espolvorea el queso por encima. Coloca algunas de las cebollas sobre el queso y cubre con la tortilla restante. La tortilla puede prepararse con un día de antelación y dejarse en el refrigerador lista para cocinar.

  • paso 3

    Para servir, calienta la mitad de la mantequilla en una sartén antiadherente. Una vez que haga espuma, desliza con cuidado la quesadilla dentro. Cocina a fuego lento durante unos 2 o 3 minutos, presionando con una espátula, hasta que la base esté bien dorada. Dale la vuelta a la quesadilla para cocinar el otro lado, añadiendo la mantequilla restante a la sartén. Lleva la quesadilla a una tabla de cortar, córtala en porciones y sírvela espolvoreada con la menta y algunas piezas de cebolla, con el resto de la cebolla al lado.

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