Huevos escoceses de salmón ahumado

Pon a hervir una cacerola con agua. Una vez que hierva a fuego lento, agrega 4 de los huevos y programa un cronómetro durante 6 minutos. Prepara un recipiente con agua helada para que, una vez que los huevos estén cocidos, puedas sumergirlos inmediatamente para frenar la cocción. Una vez fríos los pelamos con cuidado (ten paciencia al hacerlo porque las yemas aún estarán blandas). Reservar.

Mezcla los filetes de salmón, el salmón ahumado, la ralladura de limón en un procesador de alimentos para formar una pasta, salpimienta ligeramente y luego añade las hierbas aromáticas y las alcaparras. Divide la mezcla en cuatro bolas. Seca los huevos, luego aplasta una bola en la palma de tu mano y pásala alrededor de uno de los huevos hasta que esté completamente cubierto. Repite con los huevos restantes. Reservar.

Coge una bandeja y tres cuencos poco profundos. Pon la harina en un cuenco, añade la pimienta de cayena y salpimienta. Rompe el huevo restante en otro cuenco y bate, luego pon el pan rallado panko en el último recipiente. Uno a uno, pasar los huevos escoceses por la harina, el huevo y luego el pan rallado. Reservar en la bandeja.

Llena dos tercios de una sartén de fondo grueso con aceite y caliéntala a 180 ° C o hasta que un trozo de pan se dore en 20 segundos. Trabajando en tandas, fríe los huevos escoceses durante 5 minutos hasta que estén dorados, escúrrelos sobre papel de cocina y espolvorea por encima sal marina en escamas y un poco más de pimienta cayena. Mezcla la mayonesa con el zumo de limón, luego sirve los huevos escoceses junto con gajos de limón para exprimir.