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Ingredientes

  • 600 ml de nata líquida
  • 1 vaina de vainilla
  • 100 g de azúcar extrafino
  • 4 yemas de huevo
  • 300 g de masa de galletas con trocitos de chocolate

Preparación

  • Paso 1

    Coloca un recipiente en el congelador. Partir la vaina de vainilla a lo largo, raspar las semillas con la punta del cuchillo y verter en una cacerola con la nata y la vaina. Llevar a ebullición, luego retirar del fuego y dejar infusionar durante al menos 20 minutos. Para obtener el mejor sabor, esto se puede hacer unas horas antes y dejar enfriar (consulta los consejos de la receta abajo).

  • Paso 2

    En un bol grande, bate el azúcar y las yemas de huevo durante unos minutos hasta que adquieran un color pálido y esponjoso. Vuelve a poner la crema de vainilla al fuego hasta que esté a punto de hervir, luego cuélala con cuidado sobre las yemas, batiendo con la batidora hasta que esté completamente mezclado.

  • Paso 3

    En este punto, coge un recipiente grande con agua helada y coloca un recipiente más pequeño dentro. Vierte la crema nuevamente en la cacerola y cocina a fuego bajo, revolviendo lenta y continuamente, asegurándote al revolver de que la cuchara toque el fondo de la cacerola, durante aproximadamente 10 minutos hasta que espese (lee los consejos a continuación). Cuela la crema en el recipiente que se encuentra dentro del agua helada y déjala enfriar, luego bátela hasta que se pueda sacar con una cuchara o pala de helados (consulta los consejos al final).

  • Paso 4

    Coge trozos de masa para galletas y dale forma de bolas o tiras finas, aplánalas con las manos y colócalas en capas sobre el helado. Congélalo hasta que esté sólido.

Consejos para la receta

  • Paso 1

    Para conseguir el mejor sabor, deja infusionar la leche y la nata con la vainilla varias horas, si es posible.

    Para hacer el helado con heladera

    Simplemente echa la crema fría y procésala hasta que esté congelada, después transferir a un recipiente frío.

    Reglas de oro

    Cuando hagas natillas caseras, tienes que cocinarlas tan lentamente como sea posible, y nunca puedes dejar que hierva. Estás intentando cocinar los huevos sin que cuajen, así que ponlos en el fuego más bajo posible. También debes revolver continúamente, asegurándote de que la cuchara de madera con la que revuelves llegue al fondo de la cacerola, los bordes, y todos los rincones de la olla.

    Para hacer el helado sin heladera

    Mete la crema enfriada en un recipiente de metal en el congelador. Cuando tenga la textura de granizado, revuelve vigorosamente. Devuélvelo al congelador y repite este proceso al menos dos veces más, después deja que se congele hasta que se pueda coger con una cuchara de helados. Por último, transfiere a un recipiente más pequeño.

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