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Ingredientes

Para las galletas

  • 200 g de mantequilla sin sal, ablandada
  • 200 g de azúcar dorado
  • 1 huevo grande
  • ½ cucharadita de extracto de vainilla
  • 400 g de harina común, más extra para espolvorear
  • 20 g de caramelos efervescentes (o chispas de colores para niños muy pequeños)

Para decorar

  • Pasta de azúcar blanca, negra y gris
  • 100 g azúcar glas

Preparación

  • Paso 1

    Precalienta el horno a 200°C/180°C con ventilador/gas 6 y forra una bandeja con papel de hornear.

  • Paso 2

    Pon la mantequilla en un bol y bátela con varillas eléctricas hasta que esté suave y cremosa. Añade el azúcar, luego el huevo y la vainilla, y finalmente la harina para hacer una masa. Si la masa se siente un poco pegajosa, añade un poco más de harina y amásala. Envuelve en film transparente y pon en la nevera durante media hora.

  • Paso 3

    Pasado este tiempo espolvorea generosamente una superficie con harina y corta la masa por la mitad. Extiende una mitad hasta un grosor de 5 mm. Usando un cortador de galletas con forma de fantasma (o cualquier cortador de forma 'espeluznante' que te guste), corta 12 formas de fantasma, que harán 4 galletas. Coloca las formas cortadas en una bandeja para hornear forrada con papel de hornear y vuelve a poner en la nevera. Repite con la segunda mitad de la masa y saca las galletas de fantasma enfriadas.

  • Paso 4

    Usando un cortador más pequeño o un cuchillo, corta un agujero con forma de fantasma en el medio de 4 de las galletas en la bandeja, ¡este es el espacio para almacenar el centro sorpresa! Pon las galletas en el horno durante 10-12 minutos, hasta que estén pálidas pero cocidas. Transfiere a una rejilla para enfriar. Repite con la otra bandeja.

  • Paso 5

    Una vez que todas las galletas se hayan enfriado completamente, están listas para ser ensambladas. Combina el azúcar glas con 3 cucharadas de agua y mezcla bien. Debe estar bastante espeso, añade un poco más de azúcar glas si la mezcla está demasiado líquida. Toma una galleta entera y extiende un poco de glaseado alrededor del borde. Después presiona encima con una galleta con el agujero en el centro. Espolvorea caramelos efervescentes en el hueco que has creado (o chispas de colores como alternativa, si las sirves a niños muy pequeños). Extiende glaseado en el borde de la segunda galleta y presiona otra galleta entera encima. Deja a un lado para que se endurezca. Asegúrate de dejarlas un rato para que no se deslicen cuando estés terminando la decoración.

  • Paso 6

    Una vez que las galletas se sientan firmes y el glaseado se haya fijado, usa la pasta de azúcar para decorarlas como desees, extendiéndola, para cubrir las galletas. Quizá tengas que usar un poco del glaseado para pegarla. Decora con bolígrafos de glaseado si quieres.

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