Fritos de tofu birmanos (tohu jaw)

Mezcla todos los ingredientes para la salsa en un bol. Cubre y reserva.

Engrasa un molde de 15 x 20 cm. Pon la harina, la sal, el caldo en polvo, la cúrcuma, el polvo de hornear y 350 ml de agua en un bol grande y bate bien. Cubre y deja en un lugar fresco durante 2 horas, batiendo ocasionalmente.

Vierte 250 ml de agua hirviendo en una cacerola grande a fuego alto. Añade el aceite, luego vierte la mezcla de harina y remueve lentamente con una cuchara grande. Reduce el fuego a medio-alto. Continúa removiendo durante hasta 10 minutos hasta que la mezcla comience a burbujear y adquiera una consistencia espesa, similar a la de una crema pastelera. Vierte en el molde y deja a temperatura ambiente para que se asiente y enfríe completamente.

Escurre cualquier exceso de líquido, envuelve el tofu en papel de cocina y colócalo de nuevo en el molde. En este punto, puedes cubrir y refrigerar hasta por 48 horas hasta que sea necesario.

Cuando estés listo para freír los buñuelos, desenvuelve el tofu y córtalo en rectángulos de 5 x 3 x 1 cm.

Calienta un wok o una freidora con 5 cm de aceite (no más de un tercio lleno) hasta que puedas sentir ondas de calor cuando sostienes tu mano a 10 cm por encima de la freidora. Baja suavemente 3 o 4 rectángulos de tofu en el aceite caliente; deberían comenzar a chisporrotear casi de inmediato. Fríe durante 3 minutos hasta que estén dorados, luego voltea suavemente y fríe por otros 3 minutos. Retira con una espumadera y escurre en un colador colocado sobre un plato para recoger el exceso de aceite. Repite con el siguiente lote.

Cuando hayas frito todos los buñuelos de tofu, vuelve a colocarlos en el aceite caliente y fríe por otros 4-5 minutos para obtener más crujiente. Escúrrelos en abundante papel de cocina y sirve con la salsa de ajo o una salsa de chile dulce.