
Crumble de membrillo y ciruela
Este crumble casero de ciruelas y membrillo, que en su versión más básica consiste en un postre anglosajón de fruta cubierto con una mezcla de harina, azúcar y mantequilla, se cocina lentamente durante casi 4 horas. Sírvelo con natillas de vainilla en cualquier comida otoñal.
- 6 membrillos
- 160 g de azúcar
- 6 ciruelas
- mantequillapara engrasar
- ½ limónexprimido
Para la cobertura de crumble
- 175 g de harina
- 50 g de azúcar glas
- 50 g de azúcar moreno muscovado
- 100 g de mantequillafría y cortada en trozos pequeños
- 100 g de copos de avena
- 2 limonesrallados
Valor nutricional: por ración
- kcal513
- grasa16.1g
- saturadas9.4g
- carbohidratos91.3g
- fibra4g
- proteína6.4g
- sal0.2g
Preparación
paso 1
Precalienta el horno a 180°C/ventilador 160°C/gas 4. Coloca los membrillos en una bandeja para horno y espolvorea con la mayor parte del azúcar. Añade 200 ml de agua, cubre con papel de aluminio y pon en el horno precalentado durante aproximadamente 3 horas; las frutas cogerán un color oscuro. Revisa después de 2 horas para asegurarte de que aún hay agua en el fondo de la bandeja. Añade otros 100 ml de agua. Cuando estén listos, retira el papel de aluminio y deja que los membrillos se enfríen. Pélalos con cuidado y corta toda la pulpa, sin desperdiciar nada.
paso 2
Lava y corta las ciruelas, quitando los huesos. Combina todas las frutas y jugos, añadiendo el zumo de limón. Coloca esto en el fondo de tu fuente para crumble tras haberla engrasado con mantequilla (o usa platos individuales), esparciendo el azúcar restante.
paso 3
En un bol, mientras los membrillos se cocinan, mezcla la harina, los azúcares y los trozos de mantequilla fría. Es importante que la mantequilla esté fría o terminarás haciendo más una masa que un crumble. Cuando se haya logrado una textura desmenuzable, añade la avena y la ralladura de limón. Combina bien y coloca la mezcla de crumble en el refrigerador hasta que sea necesario.
paso 4
Cuando todas las frutas estén listas, esparce la mezcla de crumble por encima. Pon el postre en el horno y cocina durante 45 minutos hasta que tenga un color dorado oscuro y un aspecto crujiente. Sírvelo con natillas.