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  • 500 ml de leche
  • 75 g de azúcar moreno suave
  • 3 ½ cdtas de levadura seca activa
  • 1 huevo de corral
    batido
  • 700 g de harina
  • 75 g de mantequilla
    derretida
  • aceite vegetal
    para freír
  • azúcar de canela
    para espolvorear
  • yogur, helado o sirope dorado, para servir
    (opcional)

Valor nutricional: por ración

  • kcal147
  • grasa5g
  • saturadas2g
  • carbohidratos21g
  • azúcares3g
  • fibra1g
  • proteína3g
  • sal0.07g
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Preparación

  • paso 1

    Mezcla la leche, el azúcar, la levadura, el huevo y la harina hasta que se forme una masa, no te preocupes si no está suave. Cubre y deja levar durante 1 hora a temperatura ambiente, luego incorpora la mantequilla derretida con una cuchara de madera o espátula. Cubre nuevamente, transfiere al refrigerador y deja levar durante toda la noche.

  • paso 2

    Al día siguiente, saca la masa del refrigerador y deja que alcance la temperatura ambiente durante 1 hora antes de freír. Llena una sartén ancha y profunda con aceite hasta un tercio y calienta hasta que un trozo de masa empiece a chisporrotear al caer en el aceite. Fríe de 3 a 4 cucharadas de masa a la vez hasta que estén doradas, alrededor de 1 o 2 minutos, luego voltea y repite por el otro lado. Alternativamente, coloca la mezcla en una manga pastelera, corta el extremo y vierte directamente en el aceite caliente. Retira los buñuelos a un plato cubierto con papel de cocina para escurrir y repite hasta que toda la masa se haya usado. Si es necesario, mantén caliente en un horno bajo mientras fríes el resto.

  • paso 3

    Pasa los buñuelos calientes a un tazón resistente al calor, espolvorea con azúcar de canela y mezcla suavemente para cubrir. Sirve caliente.

CONSEJO DE LA RECETA

Puedes agregar otros sabores a esta masa como cacao, chispas de chocolate, manzana rallada o plátano triturado.

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