Bocaditos veganos de lentejas y frutos secos

Pon las semillas de lino en un tazón pequeño y mezcla con 2 cdas de agua, luego deja reposar entre 5 y 10 minutos hasta que el agua espese a una consistencia pegajosa. Mientras tanto, coloca la cebolla en un procesador de alimentos y tritura hasta que esté finamente picada. Calienta el aceite en una sartén, añade la cebolla y cocina durante 5 minutos hasta que se ablande.

Coloca las nueces en el procesador de alimentos y tritura hasta que estén picadas en trozos gruesos. Espolvorea 3 cdas de los frutos secos sobre un plato y reserva. Agrega las lentejas, el pan rallado, la salvia, la manzana, las semillas de lino remojadas (más cualquier líquido en el tazón), las cebollas picadas y abundante condimento al procesador. Pulsa hasta que la mezcla esté combinada, pero no piques demasiado fino o las albóndigas perderán su agradable textura de frutos secos.

Engrasa y forra una bandeja de horno con papel de aluminio. Retira la cuchilla del procesador y engrasa tus manos. Saca trozos del tamaño de una nuez de la mezcla, forma bolas, luego rueda en el plato de frutos secos picados para cubrir. Coloca en la bandeja de horno preparada. Se puede cubrir con film transparente y refrigerar hasta dos días o congelar durante dos meses.

Calienta el horno a 200°C/180°C con ventilador/gas 6. Desenvuelve (si está refrigerado) y hornea durante 25 o 30 minutos hasta que los frutos secos estén un poco más oscuros y las bolas se hayan endurecido ligeramente; al principio estarán más blandas, pero se endurecerán después de unos minutos de enfriamiento. Si estás cocinando desde congelado, hornea durante 35 o 40 minutos.